El paro y la labor de las ETT
Desde el comienzo de esta gran y terrible crisis, en los
primeros días de cada mes nos aterran con las cifras cada vez más elevadas de
la gente que ha ido a parar a las listas del paro.
El gobierno nos manda el mensaje “tranquilizador” de que no
aumentan ya tanto como en los mismos meses del año pasado. ¡Nos ha fastidiado!
Es que ya no hay tantos trabajando como entonces. A este paso se van a quedar
sólo los funcionarios.
Pero… tranquilos, que las ETT nos “ayudan” a encontrar el
puesto de trabajo deseado. Ja y ja¡¡¡.
Si ya inútil es el INEM que jamás te llaman para enviarte a
una entrevista, más inútiles son aún las ETT.
Tienes que estar dentro de los rangos de edad y
conocimientos que estas empresas consideran “rentable” para su existencia para
que tus posibilidades de colocación se cumplan.
Las mujeres mayores de 35 años y los hombres por encima de
los 40… lo llevan claro. Ni se molestan en conocerte, aunque tu CV esté nutrido
de conocimientos y experiencia. Y si has sido agraciado/a y te han
entrevistado, nunca pero nunca te llaman para informarte de que no has sido
seleccionado/a.
Claro, que todavía no se han dado cuenta de que tratan con
seres humanos. Y se les olvida que son precisamente esos seres humanos los que
permiten que ellos tengan ese puesto de trabajo ya que sin los parados las ETT
no existirían.
Vaya pandilla de desconsiderados e ineficaces. Estamos
apañados¡¡¡.
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